Si bien aún se está investigando la causa subyacente del COVID-19 persistente, se sabe que la inflamación crónica es un factor importante, y por eso, la nutrición antinflamatoria puede ayudar a combatir los síntomas del COVID-19 persistente y a mejorar la recuperación.
Índice
¿Qué es el COVID-19 persistente?
El COVID-19 persistente es una afección en la que los síntomas del COVID-19 continúan más allá más allá de las 4-12 semanas posteriores a la infección.
Los síntomas pueden incluir fatiga, dificultad para respirar, dolor muscular, dolor de cabeza, pérdida del olfato o del gusto y problemas para dormir. También se ha reportado una serie de problemas de salud mental como ansiedad y depresión en pacientes con COVID-19 persistente.
Aunque no se sabe con certeza qué causa el COVID-19 persistente, algunos estudios sugieren que la inflamación crónica puede ser un factor importante.
Se ha detectado en pacientes con COVID persistente deficiencias de micronutrientes, (vitaminas B1, B2, B3, B5, B6, B12, folatos, selenio y magnesio, ácidos grasos Omega 3, aminoácidos y otros factores como triptófano, tirosina, fenilalanina, etc.), así como un exceso de estrés oxidativo.
Alimentos antiinflamatorios para combatir el COVID-19 persistente
Una dieta antiinflamatoria se centra en alimentos que reducen la inflamación en el cuerpo y evita aquellos que pueden aumentar la inflamación. Aquí hay algunos consejos dietéticos para ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo
Una alimentación saludable puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo y mejorar los síntomas del COVID-19 persistente.
A continuación, ofrecemos una guía detallada sobre las pautas de alimentación recomendadas:
Frutas y verduras
Las frutas y verduras son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes que pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo y fortalecer el sistema inmunológico. Se recomienda consumir al menos cinco porciones de frutas y verduras al día para mantener una alimentación saludable. Algunas frutas y verduras recomendadas incluyen:
- Tomates
- Cítricos
- Espinacas
- Brócoli
- Zanahorias
Grasas saludables
Las grasas saludables como el aceite de oliva, el aguacate, los frutos secos y el pescado pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Se recomienda consumir pescado dos veces por semana para obtener suficientes ácidos grasos Omega-3, que tienen propiedades antiinflamatorias.
Algunos pescados que podrían ser particularmente beneficiosos para las personas con COVID-19 persistente incluyen:
- Salmón: rico en ácidos grasos Omega-3 y vitamina D, que pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud ósea.
- Sardinas: ricas en ácidos grasos Omega-3, proteínas y calcio, que pueden ayudar a fortalecer los huesos y reducir la inflamación.
En cuanto a los frutos secos y semillas que podrían ser particularmente beneficiosos para las personas con COVID-19 persistente:
- Almendras: ricas en vitamina E, que puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud de la piel.
- Semillas de chía: ricas en ácidos grasos omega-3 y fibra, que pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud digestiva.
Incorpora especias y hierbas
Las especias y hierbas, como la cúrcuma, el jengibre y el ajo, tienen propiedades antiinflamatorias y pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Considera incorporar estas especias y hierbas en tus comidas diarias.
Proteína magra
La proteína magra, como la carne de pollo, el pavo y el pescado, puede ayudar a reconstruir los músculos y reducir la inflamación en el cuerpo.
Hidratación adecuada
Es esencial que los pacientes con COVID persistente se mantengan hidratados adecuadamente. La fiebre, los sudores nocturnos y los problemas respiratorios pueden provocar una pérdida significativa de líquidos. Se recomienda que los pacientes beban al menos 8 vasos de agua al día, y más si están experimentando sudores o fiebre.
Suplementos nutricionales
Los pacientes con COVID persistente pueden beneficiarse de los suplementos nutricionales. La vitamina D, el zinc y el magnesio pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico y reducir la inflamación en el cuerpo.
Por otra parte, algunos pacientes con COVID persistente pueden tener problemas para comer grandes comidas debido a problemas digestivos o falta de apetito. En estos casos, se recomienda comer comidas más pequeñas y frecuentes para asegurarse de que el cuerpo reciba suficientes nutrientes.
Asimismo, planificar las comidas puede ayudar a mantener una dieta equilibrada. Se recomienda hacer una lista de compras y planificar las comidas con anticipación para asegurarte de que estás recibiendo una variedad adecuada de alimentos.
Alimentos que empeoran el COVID-19 persistente
Algunos alimentos y hábitos pueden aumentar la inflamación en el cuerpo y empeorar los síntomas del COVID persistente.
Evita alimentos procesados y refinados
Los alimentos procesados y refinados, como los cereales azucarados, las galletas y los pasteles, pueden aumentar la inflamación en el cuerpo. Trata de evitar estos alimentos y opta por opciones más saludables y naturales.
Reduce la ingesta de carne roja y lácteos
La carne roja, los embutidos y los lácteos pueden aumentar la inflamación en el cuerpo, por lo que se recomienda limitar su ingesta. Si decides consumir carne roja, opta por cortes magros y de alta calidad.
En cuanto a los lácteos, considera opciones sin lactosa o alternativas vegetales como la leche de almendras o de soja.
Evita las bebidas azucaradas
Estas bebidas contienen altos niveles de azúcares refinados y pueden aumentar la inflamación en el cuerpo.
Asimismo, el alcohol y el tabaco pueden causar estrés en el cuerpo y empeorar los síntomas de la COVID persistente. Se recomienda que los pacientes eviten el consumo de alcohol y tabaco.
Aunque seguir una dieta antiinflamatoria puede ser una herramienta complementaria para mejorar la salud y la recuperación del COVID-19 persistente, siempre es importante hablar con tu médico antes de realizar cambios significativos en tu alimentación.
Si tienes alguna duda sobre la dieta antiinflamatoria, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
En la Clínica de la Doctora Jéssica Ruiz, en la Laguna (Tenerife), encontrarás la supervisión médica imprescindible para llevar a cabo una dieta antiinflamatoria adecuada a tus necesidades y objetivos de manera individualizada.