El dolor crónico es una realidad para millones de personas en el mundo. De hecho, se estima que 1 de cada 4 personas vive con algún tipo de dolor que persistente. Este tipo de dolor no solo afecta la calidad de vida, sino que también puede influir en nuestro bienestar emocional y mental. Sin embargo, lo que muchos no saben es que la alimentación juega un papel fundamental en el manejo del dolor. A través de una dieta adecuada, es posible reducir la inflamación, controlar el peso y, en muchos casos, aliviar los síntomas del dolor crónico.

En este post, exploraremos cómo una buena dieta puede ser un tratamiento efectivo para quienes padecen dolor crónico y qué alimentos y nutrientes pueden marcar la diferencia.

¿Cómo influye la dieta en el dolor crónico?

Muchos tipos de dolor crónico, como el dolor en las articulaciones o la fibromialgia, están relacionados con la inflamación. Cuando el cuerpo está inflamado, las señales de dolor pueden ser más intensas y constantes.

La dieta puede influir en la inflamación del cuerpo. Algunos alimentos tienen propiedades que ayudan a reducir la inflamación, mientras que otros pueden incrementarla.

En este video puedes ver en RTVC a la Doctora Jéssica Ruiz explicando la relación entre la alimentación y el dolor crónico:

La elección de nuestros alimentos puede ser un factor clave en el tratamiento del dolor crónico, ya que puede ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.

Relación entre peso y dolor crónico

Muchas personas que viven con dolor crónico también enfrentan problemas de peso. Cuando se tiene sobrepeso u obesidad, el cuerpo debe trabajar más para realizar movimientos cotidianos, lo que puede aumentar la presión sobre las articulaciones y, a su vez, intensificar el dolor.

Además, el exceso de peso está vinculado a una mayor inflamación en el cuerpo. El tejido adiposo, o tejido graso, puede liberar sustancias químicas que fomentan la inflamación. De esta manera, las personas con sobrepeso pueden experimentar un ciclo en el que el dolor crónico provoca una menor actividad física, lo que conduce a un aumento de peso y, a su vez, a un mayor dolor.

Perder peso, aunque sea solo una pequeña cantidad, puede tener un impacto significativo en la reducción del dolor.

¿Cuál es la mejor dieta como tratamiento del dolor crónico?

La mejor dieta como tratamiento del dolor crónico es la dieta antiinflamatoria. La nutrición antiinflamatoria se basa en llevar una dieta que reduce los marcadores inflamatorios del cuerpo. Este tipo de dietas se caracterizan por ser ricas en antioxidantes y están compuestas por grasas poliinsaturadas, polifenoles y micronutrientes como el magnesio, la fibra y la vitamina C, que actúan contra la inflamación de manera similar al ibuprofeno.

Esta dieta es la mejor opción para el tratamiento del dolor crónico por varias razones. En primer lugar, al incluir alimentos que combaten la inflamación, se pueden aliviar los síntomas del dolor de manera efectiva. Esto es crucial para mejorar la calidad de vida de quienes sufren de dolor crónico.

En segundo lugar, la dieta antiinflamatoria fomenta hábitos alimenticios saludables y sostenibles a largo plazo. Al centrarse en alimentos naturales y de temporada, no solo se mejora la salud general, sino que también se promueve la pérdida de peso, lo que puede ayudar a reducir la presión sobre las articulaciones y mejorar la movilidad.

Nutrientes clave en el tratamiento del dolor crónico

Al considerar la dieta como tratamiento para el dolor crónico, es fundamental prestar atención a ciertos nutrientes que juegan un papel crucial en la reducción de la inflamación y el alivio del dolor:

  • Ácidos grasos omega-3: Estos son conocidos por sus propiedades antiinflamatorias y ayudan a disminuir la producción de sustancias químicas que causan inflamación en el cuerpo.
  • Antioxidantes: Los antioxidantes protegen las células del daño causado por los radicales libres, que pueden contribuir a la inflamación. Vitaminas como la vitamina C y la vitamina E son ejemplos de antioxidantes que pueden ser beneficiosos en el manejo del dolor crónico.
  • Magnesio: Este mineral es esencial para muchas funciones del cuerpo y se ha demostrado que tiene un efecto positivo en la reducción del dolor. El magnesio ayuda a relajar los músculos y puede aliviar tensiones que contribuyen al dolor crónico.
  • Fibra: Una dieta rica en fibra puede ayudar a mantener un peso saludable y a regular el sistema digestivo. Además, la fibra puede tener un efecto positivo en la reducción de la inflamación.
  • Polifenoles: Estos compuestos son conocidos por sus propiedades antiinflamatorias. Ayudan a combatir la inflamación y a mejorar la salud general del cuerpo.

Tratamiento del dolor crónico en Clínica de la Dra. Jéssica Ruiz

La Dra. Jéssica Ruiz participa activamente en talleres de alimentación antiinflamatoria y mindfulness para pacientes con dolor crónico en el Hospital Universitario de Canarias.

Taller nutrición y dolor crónico

Participantes en el taller de nutrición antiinflamatoria y mindfulness en el HUC.

Si bien estos talleres están disponibles para pacientes del hospital, en la Clínica de la Dra. Jéssica Ruiz te ayudamos a abordar el dolor crónico de manera integral e individualizada.

En la Clínica de la Dra. Jéssica Ruiz, en La Laguna, encontrarás la supervisión médica necesaria para llevar a cabo una dieta antiinflamatoria adecuada a tus necesidades y objetivos específicos.

No dudes en ponerte en contacto con nosotros. Estamos aquí para apoyarte en tu camino hacia una vida más saludable y equilibrada.

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